Cada producto cuenta con un tipo de especificaciones para su envasado y conservación. Esto quiere decir que, dependiendo del tipo de chorizo o embutido que adquieras, podrá variar la durabilidad del mismo.
En todo caso, al comprar embutidos, lo que queremos es que sea un producto duradero que podamos conservar el tiempo que sea necesario para hacer uso de el en los platillos que consideremos pertinentes. Además, si consideramos que se trata de productos premium de alto nivel de calidad, lo más seguro, es que pensemos muy bien antes de hacer uso del mismo o que lo guardemos para una ocasión especial para degustar este particular sabor con nuestros seres queridos.
Por estos motivos, es común que los clientes se pregunten cuánto dura el chorizo envasado al vacío y por cuánto tiempo puede conservarse con total frescura, evitando que este tiempo en el que esté reservado, pueda afectar su sabor o textura. Por esta razón queremos explicarte a detalle todo lo que debes saber del chorizo envasado al vacío.
¿Se debe refrigerar el chorizo?
Si has comprado o tienes pensado adquirir chorizo envasado al vacío, es importante que consideres que este puede durar en su empaque, sin ser abierto y en un ambiente fresco hasta un lapso de 90 días, aunque estas condiciones pueden variar dependiendo del tipo de chorizo que vas a adquirir.
Después de un lapso de 3 meses, el chorizo seguirá siendo comestible, pero seguramente sus propiedades hayan cambiado o se hayan generado alteraciones en el sabor, la textura y el aroma, de allí que no sea recomendable consumirlo después de este tiempo o al menos, no si deseamos conservar y disfrutar de sus propiedades a la perfección.
El proceso de envasado al vacío permite que el chorizo o los jamones y embutidos queden aislados del oxígeno que puede alterar la calidad de la carne, de allí que este sea el método de conservación más adecuado para este tipo de productos.
Envasado al vacío, no es necesario refrigerar el chorizo, debido a que este puede conservarse a la perfección en un lugar fresco y seco, bien sea en un armario o en una despensa. No obstante, una vez que el chorizo se ha abierto, lo más recomendable es refrigerarlo para evitar que agentes externos puedan afectar su composición y propiedades.
Caducidad del chorizo envasado al vacío
Tal como hemos explicado anteriormente, envasado al vacío, el chorizo puede contar con un lapso de caducidad máximo de hasta 90 días, siempre y cuando este no haya sido abierto o cortado.
Si, por otra parte, ya has abierto el precinto, puedes congelar o refrigerar el chorizo de la misma forma que otros tipos de carnes, el cual podrá durar en un estado fresco por hasta dos semanas. Si no tienes la posibilidad de refrigerarlo y deseas conservarlo al aire libre después de romper el sellado al vacío, es importante que sepas que la carne puede caducar en un lapso de 7 días, que puede reducirse si existe un alto nivel de humedad o de calor, ya que, esto afecta notablemente las propiedades del chorizo.
Cuál es la mejor manera de conservar el chorizo
La mejor forma de conservar el chorizo y los demás embutidos y jamones de origen ibérico es al vacío, por ello, no es casualidad que, al comercializar este tipo de productos, sean envasados en esta presentación.
En este sentido, las lonchas se distribuyen en el empaque y se conservan perfectamente, debido a que no existe la incidencia de oxígeno que tiene la característica de afectar las propiedades de la carne, reduciendo su tiempo de caducidad o alterando su sabor, aroma y textura.
Es por este motivo que, si vas a comprar chorizo y deseas conservarlo por un tiempo para utilizarlo en otras recetas más adelante, lo más recomendable es que compres chorizo envasado al vacío. Por otra parte, si ya has realizado la compra y has abierto el envase, podrás conservar el chorizo por un poco más de tiempo si lo refrigeras, ya que, de este modo, se evita la incidencia de agentes como el clima, las bacterias y hongos que puedas afectar e incluso, enfermar la pieza.
El chorizo envasado al vacío puede ser guardado en la despensa por un largo periodo de tiempo, por lo que no tendrás nada de qué preocuparte si no puedes consumirlo pronto o si deseas reservarlo para una ocasión especial. En todo caso, lo importante es no romper el sello mientras no se va a usar.